Un recorrido gráficovaginal al encuentro de una realidad tenebrosa / Texto por Jazmín Ra

Webcamgrafía transvaginal:

Un recorrido gráficovaginal al encuentro de una realidad tenebrosa

Por Jazmín Ra

Recorrido: como mapa de la cuerpa crítica a la estructura sociocultural que habita.

Autorretrato. Fotografía enero 2016 y ecografía nov. 2015. Foto montaje septiembre 2020, por Jazmín Ra.

Las instituciones/

Las instituciones se encargan de imponernos el monopolio de la violencia estatal, esa amenaza constante que transgrede sus obligaciones de estado para con nosotras; y que en bocas de quién la ejerce, va acompañada de burla e himno nacional.

En cualquier institución estatal que supuestamente debiese velar por nuestro bienestar y por nuestros derechos como ciudadanx; colegios, hospitales, psiquiátricos, asilos, orfanatos, retenes, comisarías, cárceles; podemos ver como es ejercida la violencia sobre nuestras cuerpas, para que con nuestro ejemplo, se pueda establecer subjetivamente sujeción y sometimiento a una autoridad incuestionable y déspota. Así la puebla es sometida, mediante los significantes en los que nuestras cuerpas viven a la sombra de ser convertidas en el bastidor de esa violencia en la que se válida.

En este escenario de frialdad extrema, en donde se conjugan los métodos de vigilancia, control y castigo, con una subjetividad de desidia y olvido; es que busco una reapropiación de nuestros relatos situados; re apropiación además de toda la técnica que el capitalismo ha acumulado y privatizado, convenciendonos de que no nos pertenece.

Busco además una reapropiación del deseo: que experimentado como goce impuesto, en muchas ocasiones ha sido la moneda de cambio para recibir injustificadamente la doctrina de la disciplina.

“Es porque te lo buscaste, que hoy estás aquí; toda la estructura me permite mirarte por dentro”

autogobierno/

-A veces le rezo al capital con gozo, como si fuera un dios, para evidenciar que no creo en nada:
Me paro frente a un monumento fálico a chupar un dildo; realizó una misa negra: un ritual sexual de primavera;-

“Te voy a castigar”

-y gozo, si, gozo porque el goce es ambiguo- con las aguas de angustia que la violencia tiene para mí, me lavan por la fuerza y me meo suspirando;
…y usted que creyó que me iba a ofender. –

“Mójate, para que pueda entrar”.

Falo x falo, Fotografía por Lorna Remmele. Agosto 2015.

Creo en el hackeo: en hacer que la estructura se tambalee; producir grietas, fisuras por donde podamos ingresar todas esas que hemos sido llamadas históricamente abyectas; para instalar allí nuestra emancipación.

-el terror ahora es mío, aunque sea solo por un momento-

Hackeo mi propia oscuridad, mi propio miedo, lo hago mío. Y rezo al caos, porque el encuentro con el real violento, sea pospuesto.

la webcam/

y el arma /

Objetos significantes que contienen una dualidad gozosa, ambigüedad que permite el hackeo y que sostiene la reapropiación; una tecnología de resistencia-.

Web cam y arma. Fotografía por Lorna remmele, Agosto 2015.
I
Falo x Falo Costanera center
Falo x falo. Frame video por Carlos Huarcaya, fotomontaje por Jazmín Ra. Costanera center, Santiago. Marzo 2017.

El falo es un significante que instala en nuestras subjetividades la estructura del patriarcado; la ley es el padre que posee el falo erecto; infecta con su semilla, mea las territorias, administra la vida, instala su pensamiento, construye civilización.

Busco esos significantes en la calle; Busco esos significantes en mi casa, los encuentro en todas partes: en la cuchillería entre los platos sucios, en los honores arquitectónicos históricos a los violadores de esta tierra, y en los nuevos honores a las corporaciones y centros de productividad comercial.

Instala el signo de su presencia, verticalidad como sinónimo de omnipresencia, verticalidad como sinónimo de omnipotencia, verticalidad como único sexo, verticalidad como cuerpo de pie, verticalidad como sinónimo de humanidad.

Falo como significante.

Falo x falo, contraponer un significante frente al otro, evidenciar la doctrina y engullirla sublevada: que desaparezca en las fauces de mi oscuridad, de mi supuesta falta, de mi sexa inexistente y envidiosa.

Nuestra histeria será histórica, mientras la historia no sea nuestra.

II
Cum shot in the nature

Falo x falo, cum shot in the nature. Frame video por Juan Yolin, fotomontaje por Jazmín Ra. Julio 2015.

La cámara

La cámara: la mirada vigilante, penetrante; que hace el fichaje, que instala el panóptico, el punto de control.

La cámara: que contiene la bala, el cañón como un ojo que mira y que penetra.

Control: en donde los ojos están ausentes, pero instalan el control propio, la conciencia de la vigilancia.

Se piensa a la cámara y a la pantalla como invasoras de espacios privados y como vigilante de espacios públicos.

Se piensa en la cámara como objeto de goce femenino; es la mirada la que me reconoce, la que me permite gozar y sentir placer.

El arma: que contiene la bala, el cañón como un ojo que mira y que penetra.

Re-apropiada, como ejercicio palimpsesto, el falo x el falo confrontados. La cuerpa desea: exhibirse pero no identificarse.

Falo x falo. Registro por Robert Peyote, sept. 2015.

La cuerpa se observa y hackea: se auto desea, se auto posee.

La significante cuerpa se convierte en el falo del ​otro​, en el espejo de su potencia, de su poder que no tiene.

La cuerpa acostada se ​gatilla​ como un arma, la cuerpa echada está viva, no está muerta. Llegamos al orgasmo: y te disparo con mis fluidos, con mi existencia.

III
Falo x falo
No queremos paz, sino la victoria

Violencia – poder.
Se me invita a un encuentro que reclama en su título “la paz como destino”.

No queremos paz sino la victoria. Frame de video por Kevin Magne, fotomontaje Jazmín Ra, oct. 2017.

Y pienso en la complejidad de la violencia, pensada para todas nosotras como ajena, en la perfecta instalación de la subjetividad del monopolio estatal de la misma.

La paz en nuestras realidades latinoamericanas, golpeadas por las necro políticas del feudo disfrazado de estado, se torna en un concepto blanqueado y de privilegio, de iglesia católica y de fascismo; idealización de instituciones que camuflan su oscuridad bajo un lienzo blanco.

Esa paz blanca nos viene a escupir en la cara.

No queremos paz sino la victoria, oct. 2017.

El arma es la metafora tanto de la violación como de la reapropiación del terror de esa amenaza. Se levanta una acción, para levantar un velo. No puede haber paz si nos tienen subyugadxs, castigxs, violadxs, muertxs.

Muchas veces la lucha de las pueblas, significa: las cuerpas puestas en primera línea a las balas, tomarse un espacio y resistir, ejercer un tipo de violencia que disgusta al patriarca, una violencia que no está legitimada por el contrato social al que nunca asistimos. Aparecemos en público; como cuerpas en alianza, para resistir y denunciar, para que el relato se entere de que existimos.

Devolver desde la precariedad de las piedras, toda esta violencia que busca aplacar nuestras cuerpas para anunciar la conquista de la territoria.

IV
Lavado (s)

No queremos paz, lavado. Fotografía por Lorna Remmele. Marzo 2019.

Chile se lava la imagen; las instituciones nos lavan las cuerpas para higenizarnos, riéndose de nuestros fluidos como formación de compromiso.

Bandera lavada. Fotografía por Lorna Remmele. Marzo 2019.

… Nuestra sangre, meados y heces los cuales no pueden tolerar.

Mi cuerpa es meados, sangre puérpera y heces, mi cuerpa es real y precaria, mi cuerpa esa de la que te ríes cuando voy a parir.

Lavado, o el asilo contra la opresión. Frames de video Andrés Valenzuela, diciembre 2019.

V
El estado de Chile nos viola y nos mata.

El estado de chile nos viola y nos mata. fotografía por Niebla, Fotomontaje por Jazmín Ra. Dic 2019.

Los monumentos se instalan para violar nuestras miradas, las balas nos ciegan y las cámaras nos miran por dentro: nuestras casas y nuestras conchas, quieren llegar hasta bien adentro, hasta nuestros vientres, para instalar allí la semilla de su maldad, el deseo de muerte, la renuncia total.

El estado de chile nos viola y nos mata. Fotografía por Niebla. Dic 2019.

VI
Webcamgrafía transvaginal

Una realidad que supera la ficción, responsabilizar al deseo como castigo de las que luchan, humillación y vejaciones para ponernos en nuestro lugar, humillación y vejaciones como símbolo de la conquista.

Webcamgrafía transvaginal, Frame video Registro contracultural. Enero 2020.

Donde hay mujeres con voz, donde hay cuerpas diversas, donde hay las que perturban las nociones de roles que dan orden al sistema social, donde hay las que mutan en el régimen biopolítico y farmacológico, donde hay madres que paren y donde hay otras que crían; donde hay las que adoptan ancianidad y acompañan las muertes para hacer de la vida digna; donde haya madres armadas que van a la batalla con la infancia amarrada a la espalda por que no hay alternativa; y donde haya huelga de vientres:

úteras que abortan, como sujetas emancipadas y dueñas de la cuerpa territoria:

habrá conservadurismo asustado; donde haya otredad al relato oficial, apareciendo, hablando, alzando la voz: 

habrá como consecuencia puebla y territoria forzadas a tragar, hambre, sexo, falo, culpa, necropolíticas disfrazadas de paternalismo para mantener el reino, para mantener la dominación patriarcal, que nos quiere calladas y preñadas de su semilla fascista.

Las instituciones estatales ejercen el monopolio de la violencia, aplicada para disciplinarnos desde las diversas dimensiones en las que opera.

Las instituciones nos lavan con fuerza la memoria y la fragmentan. La institución se adentra, te examina, te mira por dentro con una ecografía, te hace tacto y episiotomía, se ríe de tus fluidos, con boca de matrona y con mano de marido.

Las instituciones nos violan y nos matan; nos follan por la fuerza. Nos examinan ​transvaginalmente​, para cuestionar nuestras sexualidades diversas.

Las instituciones nos cuestionan a nosotrxs; las instituciones nos desean victimizadas, re victimizadas y silenciosas: que nunca nos podamos re apropiar de nuestra experiencia: ante su violencia, solo nos dejan escenas traumáticas que revivan por dentro el terror del encuentro real, de la transparencia del mal.

O el asilo contra la opresión. Fotografía por Carlos Huarcaya. Dic 2019.

Nuestra histeria es histórica, mientras la historia no sea nuestra.

Pero ni perdón ni olvido. El terror que el estado de chile ejerce, será jamás olvidado.

Jazmín Ra

Jazmín Ra es Performista, Licenciada en Artes de la Universidad de Chile. También es Licenciada en Psicología y pos titulada en clínica psicoanalítica, de la misma universidad. Entre sus intereses se encuentra la teoría y práctica psicoanalítica desde una perspectiva crítica y feminista, y la investigación teórica en torno a la performance política feminista. Actualmente es madre y dueña de casa. En su práctica performática ha explorado temáticas autobiográficas y políticas, con el interés de cuestionar desde un conocimiento situado, el discurso hegemónico sobre el cuerpo, la sexualidad, la institución familiar y patriarcal; utilizando prácticas pornoterroristas para trastocar significantes fálicos, símbolos nacionalistas, espacios de representación públicos, que representen las estructuras psíquicas del poder, para cuestionar los imaginarios de los relatos fundacionales, patriarcales y capitalistas.

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